Final de temporada con una victoria

La última jornada entre los de Siete Aguas y Segorbe parecía que sería puro trámite, después del escandaloso resultado de la ida sumado a la ya eliminación segura de Siete Aguas, no hacía preveer lo que sucedería. El equipo local se armó de casta y orgullo para sumar tres puntos que dejaban a Segorbe sin opción alguna de clasificación.

El partido comenzó con ligero dominio visitante, tocando el balón de forma rápida y segura haciendo intervenir en más de una ocasión al portero local. El dominio físico era aplastante y hacia temer que las fuerzas de los locales no durarían mucho tiempo, pero con sólo dos cambios aguantaban a capa y espada. Pasaban más de 15 minutos de reloj y el marcador seguía a cero, no había un claro dominador y escasas intervenciones de ambos porteros, pero un despiste defensivo de la zaga local provocó un uno contra uno que el atacante visitante supo aprovechar. El cansancio de los blanqui-azules era preocupante. El partido transcurrió parejo durante los minutos restantes, pero en el último suspiro de la primera parte en una buena contra elaborada por los locales, Joan aprovechaba un paralela por banda derecha rematándola al fondo de la red al tiempo que sonaba la bocina que indicaba el fin de la primera parte. Al descanso se llegó con 1-1.

La segunda mitad no ofreció grandes distancias entre un equipo y otro, los visitantes trataban de elaborar jugadas sin demasiado acierto, algún tiro lejano, o alguna jugada con paredes obtuvieron una muy buena respuesta del portero local de la segunda parte, pero la imprecisión en los pases marcaban sus jugadas de ataque. Por su parte los de la Canaleta de Mislata, lejos de venirse abajo físicamente parecían sentirse cada vez más a gusto en el campo, con una intensidad física admirable. Esa defensa fue precisamente la que propició sus mejores jugadas de ataque, con recuperaciones en mitad de cancha y contraataques bien organizados que lamentablemente no conseguían marcar la diferencia, bien por la imprecisión en el último remate, bien porque terminaban en falta. Precisamente una falta para cortar una contra propició la expulsión de un jugador visitante. Eran dos minutos con superioridad que los de Siete Aguas debían aprovechar, aquéllos que pensaban que con el empate se conformaban los locales, se equivocaban, lejos de dejar pasar el tiempo afrontaron la superioridad con 5 de campo, haciéndola valer con pases precisos y pausados hasta hacer llegar el balón controlado al borde del área donde Guille, máximo goleador del equipo en la temporada, definió con un excelente remate de puntera al poste derecho del portero. Restaban cincuenta segundos, los de primera salieron con 5 de campo, pero la defensa supo mantener la calma, y la intensidad suficiente para que no crearan ni una sola ocasión, y de no ser por el árbitro el marcador podía haber aumentado por un doble penalti a favor de los locales que aún nadie se explica por qué no se lanzó.

La derrota de los visitantes frustró sus aspiraciones dado que eran el rival más fuerte del grupo y no lograron pasar. Por su parte, los 3 puntos conseguidos en esta victoria por los locales no supone nada en la clasificación de la copa, pero sí que deja entrever un equipo perfectamente preparado para dar el salto a la segunda división.

OCS Siete Aguas FS: Vicente, Miguel, Crespo, Guille y Mendi. También jugaron Joan, Xarly y Antonio.

Tecopal Segorbe:

Goles:

0-1, min. 18

1-1, min. 24 – Joan

2-1, min. 49 – Guille